La Liga en Juego (Capítulo II)

Quizá se pueda decir que esta vez está menos en juego que la semana pasada. Yo tengo claro que no es así.

Y decirme lo que querías, pero quedan 11 jornadas (8 para algunos culés), en las que puede pasar de todo.

Igual que se pasa de 8 a 2 y de 2 a 8, se puede pasar de 8 a 5 o de 8 a 11. Un baile de números tremendo. Los más optimistas y confiados juegan su dinero en casas de apuestas, dejándose una fortuna confiando en el club de sus amores. Y aunque yo no soy uno de esos, también confio en mi equipo.

Confio en la plantilla y en el entrenador. Y como al fin y al cabo los que salen a jugar son ellos, los voy a apoyar ya sea para que luchen por el liderato o para que luchen por la segunda plaza.

Nos vamos a Almería. Difícil. Mucho. En otro momento de la temporada se diría aquello de "un empate no es mal resultado". Pero ahora si lo sería. Y más teniendo en cuenta de que el Madrid visitar Riazor y ellos sí pueden permitirse perder algún punto en un campo tan difícil como ese.

Atentos al fin de semana. Que si todo va mal puede ponerse el Villarreal ahí detras, "apretándonos el culito"... Y yo respeto la opción de cada uno, pero a mí no me gustan esas cosas.

Espero ver a un Barça motivado. Es lo mínimo que exijo. Después se puede ganar, perder o empatar. Pero quiero ver como el campo sale mordido, estropeado, pateado y destrozado. Quiero ver a un Barça luchador. Que no se les olvide quienes somos nosotros. Ni aquí, ni en Europa. Que no se les olvide de qué somos capaces.

Si confiamos en nosotros mismos, podemos. Que aunque perdamos La Liga, aun nos quedan más opciones para llevarnos algo a la boca a final de temporada. Muchos otros no pueden decir eso.

Un saludo.

Y como siempre, el resultado, el Lunes. Esta vez con unas fresas con nata si todo va bien.