Ferguson: Temor o sensatez

Se que resultará fácil -o al menos ventajista- hacer un análisis táctico sobre como tenía que haber contrarrestado Ferguson el dominio del Barcelona en la zona central y que piezas tuvo que colocar sobre el tablero. Desconozco si el planteamiento del escocés fue fruto de un plan amarrategui premeditado o una solución obligada ante el buen toque del balón de los medios azulgranas, personalmente me decanto por lo primero.

El partido lo tuvo el Barça en la media, y se le escapó en la delantera. Por contra, el United, desapareció de mediocampo para adelante y tejió un eficaz entramado defensivo. Puntos de vista antagónicos para dos equipos que deberían de haber jugado a lo mismo y haberse convertido un choque con idas y venidas constantes. Sir Alex huyó de las batallas por todo el campo.

El primer error del manager, fue ubicar a Rooney como interior diestro puro para hacer constantemente las coberturas a Heargreaves. Con Park desplazado por completo a la izquierda (inoperante ante las embestidas de un Zambrota que recordó al del mundial y sus tiempos juventinos), Scholes y Carrick estaban obligados a arrejuntarse por el centro para evitar las trenzadas combinaciones de Xavi, Deco y un Touré. De ahí que era necesario un interior que bajase hasta la posición del “2”: Buen planteamiento táctico pero nefasta elección de las piezas. De un supuesto 4-3-3 pasó el United a un 4-4-1-1, certero en defensa pero sin posibilidades en ataque, con un desdibujado Tévez (en el bolsillo de un formidable Touré los 90 minutos) por detrás de Ronaldo (maniatado zonalmente por los dos centrales).

¿Qué debió hacer Ferguson?. Pienso que Tévez era la pieza que sobraba. En tierra de nadie todo el partido y controlado en ataque por el triángulo Milito-Márquez-Touré. El 4-4-1-1 debió de convertirse en un 4-4-2 con Rooney y Ronaldo en punta y buscando las diagonales y las espaldas de los laterales culés de perfil muy ofensivo la noche de ayer. La banda derecha cerrada con Heargreves de interior, ayudando a los dos medios centro y al lateral (bien Brown u O´Shea). El resto igual (con la salvedad de estar más fresco Rooney pero a la vez haciendo su desgaste habitual, eso sí, más coherente). La defensa hubiese gozado de la misma solidez y los dos puntas hubiesen achicado la salida del balón de Márquez y Touré. En las bandas presionando con los dos interiores y tapando las subidas de Zambrota y Abidal. El hueco generado por detrás de estos hubiese sido considerable si uno de los puntas hubiese caído a banda en las contras –arrastrando a uno de los dos centrales- y el otro hubiera entrado por el centro, sumado a las esporádicas llegadas de Scholes o los apoyos de un interior por banda contraria para centrar la atención del lateral.

Es mi modesta opinión sobre el erróneo planteamiento de Ferguson (y nefasto espectáculo ofrecido). Quizás las cosas no hubiesen cambiado, quién sabe.

¿Y el Barça?. Recital de rondos, juego al primer toque, desborde de los laterales y absoluto control del balón en la zona central. Con un pero: Excesivo juego horizontal que les hace perder el factor sorpresa. Se nota la falta de un jugador que rompa al hueco en los desplazamientos diagonales (un tipo Giuly). Messi se obsesiona en iniciar en la jugada, pidiendo el balón al pie e intentando la heroica ante tres o cuatro contrarios. Por su enorme calidad, a veces lo consigue, pero se acaba chocando contra murallas. Tiene que intervenir menos en zonas muertas del campo y buscar más el desborde sin balón. Iniesta tiende a irse a su zona natural, aprovechando su buena conducción de balón y encarando. Demasiados movimientos con balón pero escasos sin él por parte de los atacantes blaugranas. O lo que es lo mismo, movieron el balón como el gran Barça de hace dos años, pero carecen de jugadores que se muevan eficientemente sin él.

Conclusión: Disparos lejanos como primer recurso. Y es que es a pesar del abrumador dominio (posesión cercana al 70% todo el partido) el Barça no gozó de clamorosas oportunidades. La ocasión más clara fue en un movimiento en diagonal de Eto´o que supera a su par (si se tira es penalti com una casa) y no acertó a dar el pase de la muerte a Messi. Llegadas con peligro pero desbaratadas por la labor de los centrales ingleses (enrome partido de Rio). El United, con mucho menos, llegó 3 veces con claro peligro: El penalti errado por Ronaldo, una internada en el área del portugués (cometiendo penalti márquez) y una ocasión de Carrick sólo ante Valdés.

Así ví el partido. La vuelta será otra historia. El United adelantará líneas, los puntas presionaran y asfixiaran la salida del balón por parte de los centrales (sensible baja la de Márquez que aporta claridad a la hora de iniciar la jugada) y los de Ferguson tratarán de llevar la manija del partido. Old Trafford es más estrecho que el Camp Nou. No son más que pequeños detalles que facilitan un mayor desgaste y un mayor achique a la hora de robar el balón. En cualquier caso, estoy convencido que veremos un frenético partido con constantes alternativas entre uno y otro. Presiento que bastantes goles. Por tanto, todo abierto para la vuelta, en el Teatro de los Sueños.